Cuarentena y salud mental
Hace 145 días los colombianos estamos sometidos a cuarentena o Aislamiento Obligatorio, como lo ha llamado el gobierno, para mitigar el impacto del coronavirus.
Muchas han sido las medidas que se han adoptado desde el 25 de marzo cuando comenzó a aplicarse el aislamiento. Desde el pico y cédula, hasta el pico y género, pasando por cuarentenas estrictas, cierre de “fronteras” entre departamentos y municipios, toques de queda, apertura gradual de sectores de la economía, comparendos pedagógicos, sanciones, multas, etc.
Los colombianos hemos tenido que pasar este período entre decisiones nacionales, departamentales y municipales, restablecimiento de algunas actividades económicas y anuncias sobre reapertura de aeropuertos, restaurantes, centros comerciales, en fin, buscando un camino seguro hacia la nueva normalidad.
Sin embargo, el incremento de los casos de contagio cerca de 470.000, y de más de 15.000 fallecidos no están ayudando mucho. Se nos dijo que dos o tres semanas después del primer Día sin IVA, que se realizó el viernes 19 de junio, habría un alto número de contagios ante el desorden y la incapacidad para controlar la gran afluencia de púbico en centros comerciales y otros establecimientos.
La virtualidad abruma https://bit.ly/2Dg3P1B
Las cifras parecieron darle la razón a quienes vaticinaron la situación. Para el 19 de junio había un promedio diario de casos de 2.345 y para la semana que finalizó el 4 de julio ese promedio fue de 3.580 casos, es decir, un incremento del 52 por ciento, que se concentró especialmente en el Atlántico, Bogotá, Cali, Cartagena y Medellín.
Todos pensamos que ese era el máximo de contagios y que después comenzarían a bajar, pero no ha sucedido así, de hecho en las últimas semanas las cifras van por los 12.000 casos nuevos de contagio diarios y más de 300 personas fallecidas y las proyecciones nada alentadoras señalan que aún falta.
De manera que nos hemos movido en medio de siete extensiones de cuarentena y hay sectores que ya no resisten más. Comienzan a agitarse las aguas de las protestas y el descontento. Y eso, lejos de ayudar podría agravar la situación, porque estamos ante la cuarentena más larga del mundo.
En China, el 23 de enero debido a los embates del coronavirus, de decretó una cuarentena en Wuhan, epicentro de la pandemia, la cual se mantuvo durante 11 semanas, es decir 77 días.
En Italia, por ejemplo, país donde han fallecido más de 33 mil personas y registró más de 233 mil contagios en total, empezó su cuarentena absoluta el pasado 9 de marzo. Así permaneció hasta el 18 de mayo, fecha en la que gradualmente se reactivaron tiendas, restaurantes, bares e iglesias. Por tanto, el aislamiento estricto duró poco más de 70 días.
¿Rebelión o cuarentena? https://bit.ly/2zgSQ6i
Sin embargo, no hay que olvidar que en estos dos últimos países, España e Italia se han tenido que retomar algunas medidas ante rebrotes, sin que necesariamente se haya recurrido a cuarentenas, más bien algunas medidas de restricción y protección.
En Latinoamérica, hay otras naciones que también han tenido aislamientos prolongados, como Argentina y Bolivia que han sobrepasado los 100 días.
Y en medio de ese panorama de encierro se vislumbra un panorama no menos preocupante. ¿Qué está pasando con la salud mental de los colombianos en medio de la cuarentena?
Una encuesta de la Corporación Nuevos Rumbos muestra que el cerca del 80% de los usuarios del Sistema de Valoración de Bienestar Emocional tienen signos de afectación psicológica.
De los 1.747 usuarios encuestados, 79.9% muestran signos de alguna afectación psicológica; 72.2% de malestar emocional, 62.9% de ansiedad y 54.1% de ambas.
También se hizo un análisis sobre el consumo de alcohol durante el confinamiento. El 58% de los usuarios ha disminuido el consumo, y solo el 12% lo ha aumentado; esto refleja un comportamiento normal teniendo en cuenta que los bares, discotecas y establecimientos de consumo de licor han estado cerrados por más de 3 meses.
En relación con el consumo de cigarrillo, los datos arrojan que el 33% de los fumadores aumentó su consumo, pues se deriva como un síntoma de ansiedad durante el aislamiento preventivo.
Otros datos para tener en cuenta son:
· 51,2% afirma que se han afectado sus finanzas. 50% dice que tiene dificultades para pagar deudas.
· 29% dice que ve el futuro amenazante. 17% califica el futuro como positivo, pero solo 26% como algo desesperanzador.
· 61,8% dice que ha experimentado cambios negativos en su ánimo. 32,5% dice que se ha sentido más agresivo de lo normal.
· 32,3% informa que ha tenido cambios negativos en las relaciones con las personas con las que vive.
· 38% dicen no levantarse descansados; 49.3% dicen tener la cabeza llena de preocupaciones.
De acuerdo con Augusto Pérez Gómez, psicólogo y director general de la Corporación Nuevos Rumbos, los nuevos datos que arroja el Sistema de Valoración de Bienestar Emocional son preocupantes, pues “los resultados son mucho más preocupantes que los de la evaluación anterior, y están directamente relacionados con el tiempo prolongado del confinamiento, las pérdidas económicas y el pico de la pandemia”.
De manera que, estamos en una situación difícil y en una disyuntiva aún peor. Lo cierto es que si no nos cuidamos nos sumamos a esas cifras. ¿Hasta cuándo aguantaremos?
Comentarios